Tras un exitoso recorrido internacional que incluyó los festivales de Locarno, Valdivia, Vienna, La Habana, París, Marsella, e incluso Corea, la obra rodada en 1990 y terminada el año pasado por la productora Poetastros, se estrenará por fin en las salas nacionales el próximo 6 de septiembre. Protagonizada por Luis Alarcón, Patricia Rivadeneira, Francisco Reyes, entre otros actores, la película es visionaria en retratar a la sociedad nacional como un conjunto de pequeñas historias de comedia.
Por Cine y Literatura
Publicado el 12.8.2018
Un verdadero milagro cinematográfico tuvo lugar el año pasado cuando la cineasta Valeria Sarmiento, la actriz Chamila Rodríguez y el montajista Galut Alarcón anunciaron el hallazgo de material fílmico correspondiente a una película que Raúl Ruiz rodó en 1990 en Chile. Se trataba de “La telenovela errante”, largometraje de ficción inconcluso que el equipo, liderado por la viuda del fallecido autor, terminaría de realizar. Ella oficiaría de co-directora bajo el alero de la productora chilena Poetastros.
Tras un gran estreno en el Festival de Locarno, y un recorrido internacional que incluyó los cinco continentes, la película se estrenará en salas chilenas el próximo 6 de septiembre.
Se trata del largometraje número 121 del prolífico director, y el tercero que ve la luz después de su muerte.
La realidad chilena como un conjunto de teleseries
En “La telenovela errante” está presente el mejor Raúl Ruiz: sencillo, bromista, capaz de capturar el habla chilena más cotidiana y sencilla y encontrar en ella genialidad y humor. Ruiz captó rápidamente que los chilenos éramos todos adictos a la TV, y por ello hipotetizó que las teleseries debían tener un gran impacto en el inconsciente nacional. “La película gira en torno al folletín de televisión”, apuntaría el director. “Se estructura en base a la presunción: la realidad chilena no existe, más bien es un conjunto de teleseries. Son cuatro provincias audiovisuales y se respira la guerra entre los bandos. Los problemas políticos y económicos están disueltos en una jalea ficcional dividida en capítulos vespertinos. Toda la realidad chilena está tratada desde el punto de vista de la telenovela y cumple la función de filtro revelador de esta misma realidad”, argumentó el realizador en su momento.
La cinta revela lo adelantado que era Ruiz, ya que su mirada es completamente aplicable al Chile actual.
Ruiz reunió tempranamente un elenco hoy ya reconocido en la tradición del cine chileno: los actores Luis Alarcón, Patricia Rivadeneira, Francisco Reyes, Roberto Poblete y Liliana García, aunque también otros menos conocidos pero verdaderos personajes de culto, como Mario Lorca, Marcial Edwards, Javier Maldonado e incluso el valdiviano Carlos Matamala.
Galut Alarcón: “Participé en el rodaje como un mirón invisible”
El rescate y conclusión de la comedia –cuyas latas fueron encontradas en la Universidad de Duke, en Estados Unidos- fue un proceso colectivo del círculo de amigos del director.
Galut Alarcón (“La invención de la patria”, “Secos”), hijo del actor Luis Alarcón, recuerda el rodaje.
“Fue el primero al que asistí. Mi padre me avisó que estaría trabajando con un amigo del cual había hablado casi todos los días durante mi infancia y que nunca había podido conocer porque estaba en el exilio, ese era Raúl Ruiz, y por esta condición era casi mitológico para mí. Participé del rodaje como un mirón invisible y quedé maravillado con lo que pasaba en el set y alrededor del set porque era gente muy profesional que jugaba a hacer cine; entre toma y toma se tomaba harto vino, a la par de conversaciones llenas de vericuetos, se producía una especie de microclima, más parecido a una compañía de bomberos que a un rodaje. Veintiséis años después Isabel Barriga entregó una buena parte de los negativos de esa experiencia inicial y Valeria Sarmiento nos pidió que nos acercáramos a la Cineteca Nacional, donde fueron resguardados, de ahí en adelante me puse un traje de arqueólogo cinematográfico, con pera de aire y pincel en mano, al servicio de la sombra y la luz impregnada en celuloides olvidados”, dice Alarcón para el Diario Cine y Literatura.
Afiche y tráiler con propuesta retro
El filme presenta un tráiler de técnica mixta y estilo retro, reflejo del cineasta más inquieto y experimental de Chile. Éste nos introduce al tema central de la película: la curiosa forma en que hablamos los chilenos.
La cinta también presenta su afiche, una llamativa ilustración realizada por el artista chileno Tomás Ives, diseñador autodidacta que gestiona proyectos creativos y estrategias de comunicación a través del arte, el diseño y el audiovisual. Fue alumno del programa de Impact Design for Social Change en la Escuela de Artes Visuales en Nueva York y recientemente ganó Los Diez en Nueva York como uno de los mejores ilustradores latinoamericanos, y también el concurso de Arte en Vivo de la Librería Nacional.
Una suma de talentos ha efectuado una improbable operación de rescate, y ahora nos invita a celebrar el estreno de esta joya cinematográfica chilena, la cual podrá ser apreciada desde el próximo 6 de septiembre a través de su proyección en las salas de cine del país.
Tráiler: