Este libro nace de manera colectiva, pues la poeta báltica Mariliin Vassenin tenía desde hace algún tiempo la inquietud de traducir autores nacionales a su lengua, e Izak one, artista y compatriota residente en Europa, buscaba mostrar su arte en el extranjero, desde nuestra especial y particular cultura.
Por Marcelo Gatica Bravo
Publicado el 22.9.2018
El lanzamiento de Vientos del sur II / Lõounatuuled II, una nueva antología de poesía chilena contemporánea para Estonia se llevará a cabo como celebración del mes de la patria el 28 de septiembre en Hispaania Maja (Casa España), Tallinn, Estonia.
Este libro nace de manera colectiva, pues la poeta estonia Mariliin Vassenin hace algún tiempo tenía la inquietud de traducir a autores chilenos, e Izak one, artista nacional residente en Estonia, buscaba mostrar su arte desde nuestra cultura. Mi trabajo en este proyecto fue coordinar estas inquietudes y sacar una foto de la poesía chilena contemporánea. Debo ser muy claro, una microscópica foto. El resultado es Vientos del sur II /, Lõounatuuled II, un libro de poesía chilena que tiene el sello artístico de Izak one, pues a cada poema elegido dedicó una acuarela.
En el año 2015 fue publicada la primera muestra de poesía, donde incluimos algunos de los poetas fundamentales de la tradición chilena como son los Premios Nobel Gabriela Mistral, y Pablo Neruda, además, de Vicente Huidobro, Nicanor Parra y Rodrigo Lira.
Para esta ocasión buscamos autores de diversos estilos y coordenadas generacionales. Nos complace abrir el libro con Violeta Parra, una de las folcloristas fundamentales en Latinoamérica. Hay poetas nacidos antes del año 1950 que han marcado la tradición chilena, como Gonzalo Rojas, Enrique Lihn, y Jorge Tellier. Entre los años setenta y los ochenta se produjo una generación que ha renovado profundamente nuestra literatura. Cuando en Estonia había Perestroika, y en Chile estábamos bajo la dictadura de Pinochet, nacieron poetas rupturistas, como Raúl Zurita, Rodrigo Lira, Juan Cameron, Carmen Berenguer, y Elicura Chihuailaf. Mientras en el exilio el poeta Óscar Hahn rearmaba su proyecto poético que fue atacado por la dictadura.
Hemos incluido la fina mirada de Cristina Chain y poetas más jóvenes como Héctor Hernández, Julio Espinoza Guerra, Gladys González y Camilo Cantillana. Cada uno con un exquisito y refrescante trabajo poético.
De algún modo, la tradición de coros en Estonia equivale a la poesía en Chile. Recordar que hubo un tiempo donde música y poesía no tenían fronteras. Ambos pueblos poseen aquella sincronía vital enraizada en la tierra y que se ha hecho palabra y música. El libro se ha pensado como un regalo desde nuestra cultura para el pueblo estonio que cumple su centenario. En suma, regalamos a Estonia una postal de versos que provienen del sur del mundo.
VIOLETA PARRA
La jerdinera
Para olvidarme de ti,
Voy a cultivar la tierra,
En ella espero encontrar,
Remedio para mi pena.
Aquí plantaré el rosal,
De las espinas más gruesas,
Tendré lista la corona,
Para cuando en mi te mueras.
Para mi tristeza violeta azul,
Clavelina roja pa’ mi pasión,
Y para saber si me corresponde,
Deshojo un blanco manzanillón.
Si me quiere mucho, poquito o nada,
Tranquilo queda mi corazón.
Creciendo irá poco a poco,
Los alegres pensamientos,
Cuando ya estén florecidos,
Irán lejos tu recuerdos.
De la flor de la amapola,
Seré su mejor amiga,
La pondré bajo la almohada,
Para dormirme tranquila.
Cogollo de toronjil
cuando me aumenten las penas,
las flores de mi jardín
han de ser mis enfermeras.
Y si acaso yo me ausento
antes que tú te arrepientas,
heredarás estas flores:
ven a curarte con ellas.
Aednik
Hakkan harima aeda,
et sa mul ometi unuks,
loodan siit endale leida
rohu, mis ravib mu valu.
Siia ma istutan roosi,
mil jämedad okkad on küljes,
käepärast hoian siis krooni,
puhuks kui minu sees sured.
Kurbuse vastu sinine kannike,
punane nelk, et vaibuks mu kirg,
karikakarde õielehtedelt
küsin, kas temagi armastab mind.
Palju, vähe või üldse mitte,
süda mul ikka on rahulik.
Kasvavad tasakesi
rõõmsate mõtete võrsed,
kui nad on puhkenud õide,
su mälestus kaugele rändab.
Minust saab punase mooni
kõige ustavam sõber,
padja alla ta panen,
see kingib mul sügava une.
Kogust “Aednik / On võimatu” (1954)
GONZALO ROJAS
¿Qué se ama cuándo se ama?
¿Qué se ama cuando se ama, mi Dios: la luz terrible de la vida
o la luz de la muerte? ¿Qué se busca, qué se halla, qué
es eso: amor? ¿Quién es? ¿La mujer con su hondura, sus rosas, sus volcanes,
o este sol colorado que es mi sangre furiosa
cuando entro en ella hasta las últimas raíces?
¿O todo es un gran juego, Dios mío, y no hay mujer
ni hay hombre sino un solo cuerpo: el tuyo,
repartido en estrellas de hermosura, en partículas fugaces
de eternidad visible?
Me muero en esto, oh Dios, en esta guerra
de ir y venir entre ellas por las calles, de no poder amar
trescientas a la vez, porque estoy condenado siempre a una,
a esa una, a esa única que me diste en el viejo paraíso.
De Oscuro (1977)
Mida sa armastad, kui sa armastad?
Mida sa armastad, kui sa armastad, mu Jumal – kas elu kohutavat valgust
või surma valgust? Mida otsid, mida leiad, mis
see on – armastus? Kes ta on? Kas naine oma sügavuse, rooside ja vulkaanidega
või see ergav päike, minu mäslev veri,
kui temasse juureni sisenen?
Või on see kõik üks suur mäng, mu Jumal, ja polegi naist
ega meest, vaid üksainus keha – sinu keha,
mis on jagunenud ilu helkivateks kildudeks, nähtava igaviku
kaduvateks osakesteks?
Ma hukun, oh Jumal, ses sõjas,
kui möödun neist tänavail, tulles ja minnes, saamata armastada
kolmesadat korraga, sest olen ju määratud ühele,
sellele ühele, ainsale, kelle andsid mulle vanas paradiisis.
Kogust “Pimedus” (1977)
ÓSCAR HAHN
Televidente
Aquí estoy otra vez de vuelta
En mi cuarto de Iowa City
Tomo a sorbos mi plato de sopa Campbell
Frente al televisor apagado
La pantalla refleja la imagen
De la cuchara entrando a mi boca
Y soy el aviso comercial de mí mismo
que anuncia nada
a nadie
De Mal de amor (1981).
Televaataja
Siin ma nüüd jälle olen
tagasi oma Iowa City toas
Suletud teleka ees
luristan lusikahaaval Campbelli suppi
Ekraanilt peegeldub
mu suhu siseneva lusika pilt
Ja ma olen iseenese kaubanduslik teadaanne
mis ei teavita mitte kedagi
mitte millestki
Kogust «Armuvalu” (1981)
RAÚL ZURITA
El descenso
Te palpo, te toco, y las yemas de mis dedos, habituadas a
seguir siempre las tuyas, sienten en la oscuridad que
descendemos. Han cortado todos los puentes y las
cordilleras se hunden, el Pacífico se hunde, y sus restos
caen ante nosotros como caen los restos de nuestro
corazón. Frente a la muerte alguien nos ha hablado de la resurrección.
¿Significa eso que tus ojos vaciados verán?
¿que mis yemas continuarán palpando las tuyas? Mis
dedos tocan en la oscuridad tus dedos y descienden
como ahora han descendido las cumbres, el mar, como
desciende nuestro amor muerto, nuestras miradas
muertas, como estas palabras muertas. Como un
campo de margaritas que se doblan te palpo, te toco, y
mis manos buscan en la oscuridad la piel de nieve con
que quizás reviviremos. Pero no, descendidas, de las
cumbres de Los Andes sólo quedan las huellas de estas
palabras, de estas páginas muertas, de un campo largo y
muerto de flores donde las cordilleras como mortajas
blancas, con nosotros debajo y aún abrazados, se hunden.
De INRI (2003)
Laskumine
Ma kompan, ma puudutan sind ja mu sõrmeotsad,
mis harjunud jälitama sinu omi, tunnevad pimeduses, et
me laskume. Kõik sillad on suletud ja
mäeahelikud varisevad, Vaikne ookean variseb ja tema jäänused
langevad me ette samamoodi nagu meie südame
jäänused. Enne surma rääkis keegi meile ülestõusmisest.
Kas see tähendab, et su tühjad silmad siis näevad?
Et mu sõrmeotsad puutuvad ikka vastu sinu omi? Sõrmed
puudutavad pimeduses sinu sõrmi ja vajuvad
alla, nii nagu praegu vajusid mäetipud, meri, nagu
variseb meie surnud armastus, me surnud
pilgud, nagu need surnud sõnad. Ma kompan, ma
puudutan sind nagu koolduvate karikakarde aasa ja
mu käed otsivad pimeduses lumenahka, millega
me ehk uuesti elule tõuseme. Kuid ei, mahavarisenud
Andide tippudest on järel vaid siinsete sõnade,
siinsete surnud lehekülgede jäljed, pikk koolnud lilleaas,
kus vajuvad mäeahelikud nagu valged
surilinad, ja meie nende all, ikka veel teineteise embuses.
Kogust «INRI” (2003)
Marcelo Gatica Bravo es poeta y doctor en literatura hispanoamericana.
Crédito de las fotografías utilizadas: Marcelo Gatica Bravo.