Nuestro redactor salvadoreño asistió al estreno en los Estados Unidos del último filme del realizador norteamericano, y en esta crónica donde prevalece el análisis dramático de esa obra audiovisual, entrega su visión del fenómeno que suscita el ya mítico director, entre las audiencias cinematográficas de su país.

Por Sergio Inestrosa

Publicado el 31.7.2019

Erase una vez en Hollywood es una película que acaba de empezar a ser exhibida aquí en los Estados Unidos y me imagino que pronto estará en todos los cines de nuestros países, supongo también que la traducirán como Érase una vez en Hollywood, pero puedo que no sea así, de todas formas estoy usando ese título para esta reseña.

La obra rompe con los esquemas a los que nos tiene acostumbrado el director Quentin Tarantino, quien goza de fama de ser un realizador que ensalza la violencia; bastaría con recordar películas como Pulp Fiction (1994), Django (2014), Inglourious Basterds (2009) para darnos cuenta que a Tarantino, mencionar solo algunos ejemplos de las películas que glorifican la agresividad, en un país ya de por sí violento (aunque a veces no lo parezca).

Sin embargo, esta vez Tarantino nos presenta una cinta diferente, una película en la que nos muestra su visión idílica de los años 70, especialmente de 1969 en la ciudad de los Ángeles. Una urbe que en la película aparece como paradisíaca, con muy poco tráfico, con las autopistas libres para correr, sin gente durmiendo en las calles, con coches que ahora se ven más en Cuba que en los Estados Unidos, con el surgimiento de las cadenas de “comida rápida” como Taco Bell; apenas el contacto con la grosera realidad está dado por una comunidad de hippies que vive a las afueras de la metrópolis.

La mayor parte del largometraje se centra en la industria del cine y en el trabajo de filmación, especialmente, de películas tipo western, donde no podían faltar los mexicanos siempre haciendo trabajos secundarios, estacionando carros o detrás de la barra de la cantina.

Entre las partes irónicas de la película está una frase que le dice Brad Pitt a Leo DiCaprio, quien ante una de las crisis de identidad de aquel, reflexiona: “no debe llorar enfrente de los mexicanos”; otra de las escenas irónicas es cuando Pitt le da un aventón a una de las chicas hippies y ella le ofrece mientras maneja, masturbarlo. Ante esa oferta, él le pregunta su edad, ella le dice que tiene 18 años, y él le dice que no le cree y allí acaba la seducción.

Mucho de la película transcurre en la filmación de los largometrajes, asistimos a las crisis que el actor principal Leonardo Di Caprio como el malvado Rick Dalton, Brad Pitt que hace el papel de Cliff Booth, doble de Rick y además como su asistente personal, la bellísima Margot Robbie que como Sharon Tate (personaje que en la vida real fue la esposa del famoso director Roman Polanski y quien fuera asesinada el 9 de agosto de 1969, por algunos de los seguidores de Charles Manson, los cuales entraron a su casa en Beverly Hills y terminaron con la vida de cinco personas incluyendo a la actriz, quien fue apuñalada dieciséis veces) .

Aunque la obra es más bien graciosa e irónica, a la vez, y no tiene más que dos escenas de violencia, una de ellas de suma importancia casi al final de la película, cuando tres hippies deciden vengar la afrenta que uno de sus compañeros recibió en su comunidad, por parte de Cliff Booth y para ello entran en la casa del antihéroe Rick Dalton y se encuentran con Cliff que se ha quedado a pasar la noche allí, está drogado y con él su perro; Cliff y su mascota eliminan a dos de los tres jóvenes, la tercera es quemada con un lanzallamas por parte de Rick quien está relajándose en su alberca y hasta allá llega la chica para atacarlo.

Aunque es extraño que unos hippies actúen de forma violenta el argumento que usan para justificar el ataque a Rick Dalton es interesante; pues deciden entrar en su casa y darle una sopa de su propio chocolate, pues él a través de sus actuaciones violentas le ha enseñado al público a ser violento.

La película termina cuando Rick está hablando con Polanski, pues son vecinos y la esposa del realizador polaco, quien está embarazada, invita a Rick a subir a su casa y conocer a dos de sus huéspedes que se están quedando en casa.

Si al lector de Cine y Literatura le gustan las películas de Tarantino, esta cinta le va a seducir. Como anécdota le cuento que anoche cuando terminó el largometraje la gente que estaba en la sala la aplaudió, lo cual no dejó de sorprenderme, pues pensé que el público había ido a ver una obra audiovisual violenta, pero creo que la gente fue a ver la más reciente producción del mítico cineasta, violenta o no.

Sergio Inestrosa (San Salvador, 1957) es escritor y profesor de español y de asuntos latinoamericanos en el Endicott College, Beverly, de Massachusetts, Estados Unidos, además de redactor permanente del Diario Cine y Literatura.

La actriz Margot Robbie en «Once Upon a Time … in Hollywood» (2019)

Sergio Inestrosa

Tráiler:

Imagen destacada: El actor Leonardo DiCaprio en Once Upon a Time … in Hollywood (2019), de Quentin Tarantino.