En su último trabajo publicado (Editorial Anagrama, 2020), el narrador bonaerense relata la historia de Mirta López, quien a través de la voz de su nieto, cuenta los acontecimientos que marcaron trágicamente su vida, durante la segunda mitad del siglo XX trasandino.
Por Martín Parra Olave
Publicado el 20.11.2020
El escritor argentino Martín Kohan (Buenos Aires, 1967), es autor de una vasta producción literaria, cuyo corpus incorpora volúmenes de cuentos y novelas. En el año 2007 fue ganador del Premio Herralde de novela con su obra Ciencias morales.
En su último trabajo, Confesión (Editorial Anagrama, 2020), el narrador trasandino nos relata la historia de Mirta López, quien a través de la voz de su nieto, cuenta los acontecimientos que marcaron trágicamente su vida.
Todo comienza en una localidad rural, un pequeño y aislado pueblo llamado Mercedes, que era: “Un tinglado, un caserón, un par de andenes, mucha intemperie”, y el espacio donde la joven Mirta, abuela del narrador, crece y vive junto a su familia nuclear, donde además conoce a su primer amor platónico, un joven, un muchacho en apariencia tranquilo y perteneciente a una de las familias tradicionales del lugar: los Videla, y el joven que produce la atracción de Mirta es el mayor, Jorge.
Ambos no se alcanzan a conocer ni ha tener nada, sin embargo, en los hechos posteriores, las acciones de uno y otro marcaran definitivamente sus vidas.
Las primeras páginas son la narración de una transformación inocente, un salto en la vida de esta mujer: es el despertar del cuerpo, cuando la niñez comienza a ser opacada por la sombra de la adolescencia, que llega cargada con el fuego de la pasión erótica.
Sin embargo, lo que al principio pareciera ser una historia de amor, con el paso de las páginas se transforma en una lamentable historia de terror, tal como son las historias de las dictaduras, donde la fuerza militar destruye todo lo que encuentra a su paso, torturando y haciendo desaparecer a los enemigos del régimen, sean estos culpables o inocentes.
La normalidad en la cual vive Mirta, que con el paso de los años se casó y luego se convirtió en madre, es una especie de perversa tranquilidad que de la forma más absurda, la transforman en cómplice involuntaria de los hechos que tristemente azotan a Argentina en los años de la dictadura.
A raíz de un inconsciente acto de supuesta protección maternal, esta mujer condena su vida y la de su familia a un dolor permanente, el mismo que debió sufrir infinidad de familiares de detenidos desaparecidos en el país trasandino, como en todos los países de Latinoamérica que fueron azolados por las despiadadas dictaduras militares.
Con una estructura narrativa intercalada temporalmente y una prosa fácil de seguir, esta novela capta nuestra atención desde las primeras páginas, manteniendo el hilo de la tensión puesto sobre la figura femenina que soporta la historia.
Sin embargo, la hazaña de Confesión parece estar radicada en una capacidad narrativa para dar un giro sorpresivo, y romper la tranquilidad que veníamos leyendo desde el inicio de la historia, para ir transformando progresivamente los sueños de juventud en pesadillas de adultos, y así instalarnos en lo monstruoso y aberrante de la fuerza criminal de la dictadura militar trasandina (1976 – 1983).
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Martín Parra Olave es licenciado en gobierno y gestión pública de la Universidad de Chile y magíster en letras de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Imagen destacada: Martín Kohan.