Este montaje del Teatro Mori Parque Arauco es un espectáculo dramático imperdible, no sólo para reír y disfrutar de las desventuras de esta “pareja dispareja”, sino más que nada para tomar conciencia sobre la forma en que vemos el mundo y acerca de la manera en la cual construimos nuestras relaciones interpersonales.

Por Jessenia Chamorro Salas

Publicado el 16.4.2018

Escrita por el comediógrafo francés Fabrice Roger Lacan (nieto del célebre Lacan, representante de la línea estructuralista del psicoanálisis), y estrenada originalmente en París en el año 2014, llega a las salas del Teatro Mori La puerta de al lado, una comedia romántica que pese a ser prototípica en su estructura (una pareja dispareja que finalmente se enamora), navega por temáticas que permiten reflexionar acerca de la forma en que actualmente concebimos y buscamos las relaciones afectivas y el amor, formas mediadas más de las veces por la tecnología y las plataformas que prometen encontrar al “amor de la vida” tras un click.

Dos solteros, vecinos, en plena crisis de los cuarenta, se enfrentan abruptamente. Él, jefe de marketing en una reconocida empresa de lácteos. Ella, una psicóloga que tiene su consulta en su departamento. Él, casi un niño de cuarenta años. Ella, casi una abuela de cuarenta años. Él, un hombre alegre que desea disfrutar de la juventud que se le escapa. Ella, una sobria mujer que expele cierta amargura disfrazada de ironía y pedantería. ¿Qué tienen en común? Probablemente a primera vista nada, pero lo interesante de esta puesta en escena, actuada por la siempre lúdica y enérgica Javiera Contador y por el desdoblado y expresivo Iván Alvarez de Araya que algo recuerda al Martin Mc Fly de “Volver al futuro”, es cómo esta pareja dispareja va entretejiendo un vínculo que finalmente los hace darse cuenta que el amor no estaba precisamente en el porcentaje de afinidad que las plataformas virtuales podían arrojar en búsquedas minuciosamente predeterminadas (Tinder), sino que el amor nace espontáneamente, con quien menos se imagina, e incluso, puede estar en la puerta de al lado.

Esta obra dirigida en Chile por Pato Pimienta, sigue en la misma línea que sus anteriores puestas en escena: Nuestras mujeres en 2017 y Bajo terapia en 2016, abordando temáticas cotidianas, reflexivas sobre la condición humana, cuestionando tangencialmente la situación de la posmodernidad y los desafíos que ésta implica en términos de las relaciones afectivas, filiales, laborales, entre otras.

La puerta de al lado no es solo una comedia romántica, no es solo una historia de amor, es una obra que habla sobre la soledad en la que vivimos pese a con-vivir con multitud de personas alrededor, pese a comunicarnos con una comunidad virtual (in) finita tras un celular o un computador. Trata también sobre las exigencias que ponemos cuando pensamos en una relación de pareja, cuando tratamos de que el otro sea ese ser ideal cuya afinidad sea completa, sin embargo, la vida nos enseña que no hay perfección y que precisamente allí está la gracia del asunto, porque si la hubiera, estos dos personajes jamás se habrían conocido. La obra también nos enfrenta como espectadores al espejo de nuestras propias carencias y excesos; por un lado, a la hiperracionalización de una psicóloga maniática de la limpieza y del orden, que ve en cada palabra del otro un síntoma de alguna patología psicológica; por otro, a la dificultad para asumir la edad y esa tendencia crítica a creerse adolescente, del jefe de marketing, quien aun no supera la muerte de su madre en su niñez, y parece cargar con las carencias afectivas de dicho período.

Un montaje pulcro, correcto, con una escenografía que contraste perfectamente los polos opuestos que representan los departamentos, un vestuario idóneo para caracterizar la psicología de los personajes. Diálogos dinámicos, vivaces, lúdicos, repletos de ironía y de humor. Una narración yuxtapuesta a los diálogos que dota a la puesta en escena de una literaturidad interesante y que marca un contrapunto para detenerse a pensar en lo que hacen, dicen e incluso piensan los personajes. Una iluminación propicia que indica movimientos, encuentros y desencuentros, que enfatiza tanto la soledad como el mundo propio de los personajes. Por último, más que una musicalización, la obra presenta una banda sonora que apela al target del espectador y que le brinda cierto aire cinematográfico a las escenas. Todo lo anterior hace que La puerta de al lado sea un espectáculo teatral imperdible, no solo para reír y disfrutar de las desventuras de esta “pareja dispareja”, sino que más que nada para tomar conciencia sobre la forma en que vemos el mundo y construimos nuestras relaciones interpersonales.

Los actores Javiera Contador e Iván Álvarez de Araya protagonizan el montaje de «La puerta de al lado» en el Teatro Mori Parque Arauco

Ficha técnica:

Autor: Fabrice Roger -Lacan

Dirección: Patricio Pimienta

Elenco: Javiera Contador e Iván Alvarez de Araya

Coproducción: Centro Mori y The cow company

Temporada: Desde el 7 de abril (estreno 6 de abril)

Horario de las funciones: viernes y sábado a las 22:45 horas, domingo a las 20:00 horas

Sala: Teatro Mori Parque Arauco, en el Subsuelo Boulevard del mall Parque Arauco, comuna de Las Condes, Santiago

Para obtener una mayor información del evento, revisar aquí.

Crédito de las fotografías: Centro Mori