Este montaje nos hace sumergirnos en esa problemática que el adulto joven está sufriendo: ser profesional y exitoso no es la clave para la felicidad, donde el trabajo te consume y los espacios para el esparcimiento son mezquinos, llegando a usar las redes sociales para conseguir una pareja compatible. La afectividad aparece así como uno de los elementos valóricos -que pese a encontrarse en una pieza teatral cómica– nos hace reflexionar sobre cual tiene que ser nuestra pareja ideal, a la cual con diferencias, incompatibilidades, virtudes, pero también aciertos, siempre hay que estar en disposición para conocer y así darse el tiempo de ser felices.
Por Miguel Alvarado Natalí
Publicado el 25.4.2018
Cuando se vive en departamento y un vecino es bullicioso estamos en el comienzo de un pequeño problema, pero cuando estos protagonistas están separados por un pasillo donde ella es una psicóloga muy aplicada, ordenada y maniática del aseo; y él es un ejecutivo encargado de la publicidad de un nuevo yogurt, que le gusta disfrutar de los placeres de la vida y con rasgos de seductor, podríamos decir que estamos ante un conflicto. Partiendo de la premisa que no tienen nada en común, salvo que ambos son cuarentones, solteros y con un buen pasar económico, mas ella es facha y él es del Frente Amplio y pese a esto y sus múltiples discrepancias sabemos de ante mano que se quedarán juntos.
Javiera Contador (“Casado con hijos”, “Alma”) e Iván Álvarez de Araya (“El reemplazante”, “Los archivos del cardenal”), son los actores que dan vida a este montaje “La puerta de al lado” en la sala Mori del Parque Arauco. Después de un día de trabajo la sicóloga se estira en su sofá pero es rápidamente perturbada por la música que su vecino de al frente tiene a todo volumen, le golpea la puerta para reclamar por la bulla, pero además, lo interpela por escuchar una sinfonía del compositor austríaco, Anton Brucker, la cual era la preferida de Hitler. De aquí en adelante se desencadenan una serie de situaciones que los lleva a la interacción mutua, ataques verbales, ironías y sarcasmos donde se sacan en cara cada defecto que se encuentran del ámbito profesional y hogareño. El horno que la vecina pide prestado, el encuentro de ambos en el pasillo por la pérdida de llave de la terapeuta y la llegada de la discoteque del ejecutivo -ya avanzada la noche-, son los tiempos que sin buscarlos comienzan a compartir juntos… o juntos pero no revueltos.
“La puerta de al lado” del guionista de cine y teatro, el francés Fabrice Roger-Lacan, es una comedia dirigida por Patricio Pimienta y se nota el aporte que éste hace en la presente puesta en escena, (Club de la Comedia) que mantiene la atención del público, haciéndolo cómplice de esos elegantes insultos y referencias al psicoanálisis, que presentan los protagonistas y que fundamentalmente causa la risa en cada acto. Es entretenida, amena y contemporánea. Donde también podemos saborear la soledad que podemos tener en este mundo moderno, donde el éxito profesional puede ser un fracaso cuando cae la noche y hay que dormir solo.
Ambos actores son de lujo, Javiera Contador está y se ve genial en este montaje, es divertida y con esa extrema expresión que encanta, notablemente lúdica, el papel fue escrito para ella. Mientras tanto, Iván Álvarez de Araya sorprende al auditorio con su histrionismo y su versatilidad, ya que nos habíamos acostumbrado a sus roles seriotes y dramas oscuros como el del agente de la CNI en “Los archivos del Cardenal”. Entonces estos vecinos viven una pugna aparentemente irreconciliable, donde la antipatía de ella se contrapone a lo cordial de él, la seriedad de la psicóloga ante la sencillez casi infantil del publicista.
Con una escenografía tan bien trabajada, que a primera vista nos adelanta parte del argumento de la obra. Un ascensor al centro del escenario casi real, el cual da a un pasillo que separa dos departamentos marcados, cada cual con claras tendencias: femeninas en el de la psicóloga y masculinas en el caso de él, un jefe de marketing. Un ambiente perfecto, donde las luces en escena funcionan a tiempo para recrear esa atmósfera necesaria de día, madrugada y una tarde de almuerzo o descanso. Ambos actores se mueven con una libertad escénica que no incomoda, pese a la división del escenario y ese detalle de hacer desplazar el ascensor hacia el público, le da el factor sorpresa para un final predecible.
Este montaje nos hace sumergirnos en esa problemática que el adulto joven está sufriendo: ser profesional y exitoso no es la clave para la felicidad, donde el trabajo te consume y los espacios para el esparcimiento son mezquinos, llegando a usar las redes sociales para conseguir una pareja compatible. La afectividad aparece así como uno de los elementos valóricos -que pese a encontrarse en una pieza teatral cómica– nos hace reflexionar sobre cual tiene que ser nuestra pareja ideal, la cual con diferencias, incompatibilidades, virtudes, pero también aciertos, siempre hay que estar abiertos para conocer y así darse el tiempo de ser feliz.
Ficha técnica:
Autor: Fabrice Roger -Lacan
Dirección: Patricio Pimienta
Elenco: Javiera Contador e Iván Alvarez de Araya
Coproducción: Centro Mori y The cow company
Temporada: Desde el 7 de abril (estreno 6 de abril)
Horario de las funciones: viernes y sábado a las 22:45 horas, y domingo a las 20:00 horas
Sala: Teatro Mori Parque Arauco, en el Subsuelo Boulevard del mall Parque Arauco, comuna de Las Condes, Santiago
Para obtener una mayor información del evento, revisar aquí.
Crédito de las fotografías: Centro Mori