Sociedades inmobiliarias, mineras, bancard, holding, aerolíneas y una serie de ámbitos de negocios han sido el campo de acción de la familia del exmandatario. En este trabajo realizado por los periodistas Juan Pablo Figueroa y Sergio Jara Román se leen algunos de los capítulos más relevantes de este meteórico ascenso.

Por Martín Parra Olave

Publicado el 6.7.2022

Las investigaciones periodísticas siempre son muy bien recibidas pues dan cuenta de un tremendo esfuerzo de quienes la realizan, ya que generalmente deben hurgar y meterse en lugares de difícil acceso, donde el poder político y económico tiene los cerrojos puestos.

La vida de Sebastián Piñera, el dos veces expresidente de Chile, ha estado permanentemente marcada por los negocios y la forma en que formó su fortuna. Se ha dicho de él una innumerable cantidad de cosas buenas y malas, todas mezclando parte de su vida privada y pública, sus trayectorias como empresario y como político.

En este trabajo, realizado por los periodistas Juan Pablo Figueroa (Santiago, 1984) y Sergio Jara Román (El Cortijo, 1981), vamos a leer algunos de los capítulos más relevantes de este meteórico ascenso.

Una fortuna opaca

Dividido en seis partes el recorrido de esta investigación comienza con la acusación constitucional que recibiera Piñera por el negocio realizado con la venta de la minera Dominga:

«La familia del actual presidente de la República, Sebastián Piñera, en el año 2010 pactó la millonaria venta del proyecto minero Dominga con su mejor amigo, Don Carlos Alberto Délano. Como es de público conocimiento hoy en día, y no en aquella fecha, esa operación se hizo en las Islas Vírgenes Británicas» (p. 9), aparejando además este trato, la condición de que no cambiaría la regulación normativa para que se ejecutara la instalación de la mina.

Este punto de partida nos va a dar cuenta la forma de actuar del expresidente, que siempre ha realizado sus negocios de forma limite con lo legal.

Los periodistas, en este sentido, dan cuenta de la relevancia de escarbar entre documentación que aparentemente no tiene importancia, pero que generalmente ocultan movidas y dan cuenta de donde se va a situar el poder. Un ejemplo de esto son las sociedades de la familia del exmandatario, un permanente centro de sospechas de como se iban desplazando los intereses de los negocios del presidente.

Sociedades inmobiliarias, mineras, bancard, holding, aerolíneas y una serie de ámbitos de negocios son y han sido el campo de acción de la familia Piñera. Siempre las apuestas han sido en grande, y así como ha ganado también ha perdido.

Sin embargo, gracias a este interesante y responsable trabajo de investigación podemos darnos cuenta que jugar al limite de la legalidad ha sido una de las características de nuestro presidente, contaminando con cierta opacidad y oscurantismo el origen de su fortuna.

Al finalizar el libro sus autores reflexionan: «No esta claro que los negocios y conflictos expuestos en este libro sean efectivamente todos los que realizó su family office bajo esquemas en paraísos fiscales, son solamente los que han sido descubiertos por el trabajo de los autores» (p. 139), dejando con esto la puerta abierta para que futuros trabajos completen lo que ellos iniciaron.

***

Martín Parra Olave es licenciado en gobierno y gestión pública de la Universidad de Chile y magíster en letras de la Pontificia Universidad Católica de Chile, y actualmente cursa el doctorado en literatura impartido por esta última Casa de Estudios superiores.

«Piñera Offshore» (2022)

Martín Parra Olave

Imagen destacada: Sebastián Piñera Echeñique.