Publicada por primera vez en 1969, y considerada unánimemente como la novela que inauguró el género noir en el país azteca, la obra de Rafael Bernal es un apasionante thriller policíaco con toques de humor y cargado de violencia que retrata diferentes estratos del Distrito Federal.
Por Cristian Uribe Moreno
Publicado el 22.11.2023
El complot mongol es una novela mexicana del escritor Rafael Bernal (1915 – 1972) publicada en 1969 y que para muchos inaugura el género de la «novela negra» en el norteño país. ¡Pinche novela negra!
La historia está ambientada en Ciudad de México, a mediados de los años 60, donde se mueve a sus anchas Filiberto García, detective privado y colaborador esporádico de la policía.
García es convocado por el Coronel, un oficial que lo conoce desde la época de la revolución, y Rosendo del Valle, un alto funcionario de gobierno, para encargarle una misión: descubrir quiénes están detrás de un complot para asesinar al presidente de los Estados Unidos que visitará México en semanas.
De acuerdo a una información confidencial, un grupo de ciudadanos de la China comunista entraron al país de manera oculta para cometer el magnicidio. Los buenos lazos de Filiberto con los inmigrantes de dicho país, así como su prestigio de implacable pistolero bajo las órdenes del Estado, lo convierten en el candidato ideal para dirigir las investigaciones. Además, lo acompañarán en sus indagaciones dos agentes extranjeros, uno del FBI y otro de la KGB. ¡Pinches agentes!
Desde el inicio, el tono del relato es atrapante. Un narrador externo va refiriendo los hechos, mezclado con la voz del propio protagonista, en unos monólogos interiores que dan otro punto de vista a la historia y hacen más ameno el relato. ¡Pinche amenidad!
Un susurro de furia
La narración recoge muy bien el espíritu de las novelas de espías, el thriller y la novela negra, en especial la llamada hard-boiled, en las que prevalecen la violencia y los asesinatos. Asimismo, entre sus líneas se siente la presencia de los sucesos históricos que marcaron los años 60: el triunfo de la revolución cubana, el asesinato de Kennedy y la influencia de la China Popular de Mao. ¡Pinche influencia!
Por supuesto, se suma a todo esto la sombra de la Revolución Mexicana. Nada parece escaparse a este hecho basal para entender el andamiaje del México moderno. Los principales personajes se foguearon en las cruentas luchas guerrilleras y de ahí derivaron a distintos destinos con disímil suerte. Unos lograron escalar a altos puestos en el gobierno, otros se transformaron en funcionarios y otros quedaron a la vera del camino, como simples pistoleros. ¡Pinches pistoleros!
Y es esa condición histórica que posee México, donde todos los caminos de alguna manera llegan a la revolución y sus consecuencias, están muy bien incorporadas a las líneas narrativas que el relato va proponiendo. Entre policías, chinos, pistoleros y agentes internacionales van componiendo un abigarrado panorama de la Ciudad de México de esos años. ¡Pinches años!
Y lo que da el toque especial a toda la historia es esa voz de Filiberto que se cuela de principio a fin. La mayor parte del relato susurrando su furia. En otros momentos, trasluciendo su cansancio y hastío. No obstante, la cadencia de sus palabras da en el blanco de manera seca y certera:
«(…) ‘Me repugna matar’. Pero cuando era gobernador de su Estado, se traía a todos de un ala. Allí se llevó, como jefe de operaciones, a mi General Miraflores. A poco también ese resulta con que le repugna matar. Se me han puesto todos muy seriecitos. La revolución hecha gobierno. ¡Pinche revolución y pinche gobierno!».
La novela de Rafael Bernal tiene dos adaptaciones cinematográficas (una donde el detective es interpretado por el mismísimo Pedro Armendáriz Jr.), una adaptación para radionovela y dos adaptaciones de novelas gráficas, confirmando que es una obra vigente en el ámbito cultural mexicano.
Esto se comprueba también en la reedición de la editorial Asteroide hizo de la novela el año 2016. Una joya literaria un tanto desconocida en esta parte del mundo pero absolutamente imperdible. ¡Pinche joya literaria!
***
Cristián Uribe Moreno (Santiago, 1971) estudió en el Instituto Nacional General José Miguel Carrera, y es licenciado en literatura hispánica y magíster en estudios latinoamericanos de la Universidad de Chile.
También es profesor en educación media de lenguaje y comunicación, titulado en la Universidad Andrés Bello.
Aficionado a la literatura y al cine, y poeta ocasional, publicó en 2017 el libro Versos y yerros.
Imagen destacada: Rafael Bernal.