Escrito por David Gajardo y dirigido por Rodrigo Aro, el nuevo montaje de la compañía Ocaso Teatro se inspira en la tragedia ocurrida en 2017 cuando dos trabajadores murieron en la popular industria de caramelos Fruna. Se trata de una desbordante y oscura historia que, desde el humor negro y con música en vivo, da cuenta de temas como las prácticas antisindicales y las heridas físicas y emocionales que estas conductas provocan en las personas que las padecen y también en sus familias. Se estrena el próximo sábado 7 de marzo.
Por Cine y Literatura
Publicado el 19.2.2020
El 29 de abril de 2017, la dulzura que debería caracterizar a una fábrica de caramelos como lo es Fruna, se vio convertida en amargura al ser escenario del suicidio de Rolando Venegas (45), quien decidió quitarse la vida en su mismo puesto de trabajo. Horas más tarde, uno de sus amigos murió de un ataque al corazón al enterarse que Chocolatito —como le decían sus cercanos— se había colgado a plena luz del día. La familia de Rolando culpó al hostigamiento laboral del que era víctima, lo que quedó establecido en la carta que escribió antes de morir y es coherente con las múltiples denuncias que la empresa mantiene por paupérrimas condiciones laborales.
Ese es el punto de partida de Corazón de chocolate. Crónica de un dulce suicidio, el nuevo montaje de la compañía Ocaso Teatro (Pichanga, Mote con huesillo) y el cual se estrenará el próximo 7 de marzo en el Anfiteatro Bellas Artes. «Es un relato de empatía con el otro, con ese trabajador o trabajadora que no está ajeno a sufrir un maltrato silenciado y del cual muchas veces somos cómplices como testigos inactivos o incluso partícipes, queremos instaurar el concepto de Mobbing como una práctica real y existente de la que no nos hemos hecho cargo como sociedad y que compromete todos los aspectos de nuestra vida, emocional, física y psicológica”, explica su dramaturgo, David Gajardo.
La puesta en escena se inspira en este caso real para generar una ficción sobre lo que pudo haber ocurrido después de la tragedia, centrándose en la mujer del trabajador —que también se desempeñaba en esta fábrica— y en la venganza que planea al retomar sus funciones y ver que todo continúa como si nada hubiese pasado. Con música en vivo y mucho humor negro, el montaje utiliza también saltos en el tiempo para reconstruir la historia de su relación de pareja. “Nos interesó abordar también la dimensión humana y emocional. Las fracturas afectivas que un entorno laboral nocivo puede generar, no sólo en la persona que lo sufre, sino también en su familia y en la pareja. Vemos cómo una relación de amor puede ser destruida por lo que las condiciones de trabajo le provocan, convirtiéndose en algo distante, con turnos cruzados, teñida por la depresión. Es un daño incluso físico”, agrega su director Rodrigo Aros.
A través de Corazón de chocolate, Ocaso Teatro indaga en la hostilidad humana, en esos rincones de poder que transforman al ser humano, en la aceptación del abuso como un medio por el cual las personas comprometen su día a día con la esperanza de un futuro mejor. Para el colectivo significa una postura política y social de protesta y también la oportunidad de poner en la palestra un tema que es tan frecuente, como invisibilizado. “Todo esto ocurre en una fábrica de dulces, la más popular de Chile, donde se supone que se crean los sueños de los niños, están las fiestas, los cumpleaños, la Navidad, un mundo lleno de felicidad y dulzura. Se genera una metáfora muy fuerte que abordamos a través de una simbología a fin de generar una crónica que navega entre el drama y el humor que esta misma historia propone. Lo absurdo e impactante en sí del hecho, ya es una obra de teatro”, finalizan en conjunto David Gajardo y Rodrigo Aros.
Ficha artística:
Compañía: Ocaso Teatro.
Dramaturgia: David Gajardo Gúmera.
Dirección: Rodrigo Aro Silva.
Elenco: Loreto Araya Abdala, Leonardo de Luca, Jéssica Velásquez, Valentina Torrealba, Nidia Vargas, Gerald Havliczek y David Gajardo.
Composición musical: Tomás Peña, Martín Becerra, Alejandro Tapia.
Iluminación: Diana Fraczinet.
Diseño de vestuario: Elizabeth Pérez.
Diseño de escenografía: Sebastián Escalona.
Asistencia de dirección: Valentina Carmona.
Sonido: Gonzalo Soto.
Prensa: Claudia Palominos.
Desde el 7 de marzo hasta el 5 de abril, los días sábados y domingos, a las 20:00 horas.
Anfiteatro Bellas Artes, Parque Forestal, al costado norte del Museo de Bellas Artes en Santiago.
Valor: Sistema a la gorra, adhesión voluntaria y consciente al finalizar la función.
Crédito de las imágenes utilizadas: Compañía Ocaso Teatro.