Este nuevo libro del Premio Nobel colombiano Gabriel García Márquez (Literatura Random House, 2021) es una suerte de guía para conocer como se desarrolló su estilo creativo y el mundo narrativo que lo llevó a construir su novela más importante: «Cien años de soledad».
Por Martín Parra Olave
Publicado el 16.5.2021
Gabriel García Márquez (1927 – 1914) es sin lugar a dudas uno de los dos o tres escritores latinoamericanos más importantes de todos los tiempos.
En 1982 recibió el Premio Nobel de Literatura, coronando de esta forma una basta y contundente trayectoria literaria. Su nombre inevitablemente nos transporta al boom, ese grupo de narradores que se encargó de poner la literatura latinoamericana en el contexto internacional.
A pesar de que hoy en día se les critica, y con razón, por haber excluido las voces femeninas, gran parte de sus libros son una estación obligada, no la única por supuesto, para quienes desean conocer un momento relevante de la historia de nuestras letras.
Uno de estos textos, una especie de piedra fundante de un estilo literario, es Cien años de soledad (1967) de Gabriel García Márquez, cuya relevancia es haber consolidado el “realismo mágico”, forma literaria donde se mezcla la realidad con elementos fantásticos, generando un ambiente narrativo flexible, muy alejado de lo que se estaba escribiendo en aquellos años, pero que de forma incipiente venían explorando otros escritores como el guatemalteco Miguel Ángel Asturias.
El libro Camino a Macondo (Literatura Random House, 2021) es una suerte de guía para conocer como se desarrolló su estilo literario y el mundo narrativo que lo llevó a construir su novela más importante:
“Esta antología, realizada con el ánimo de rastrear el derrotero del escritor, le permitirá al curioso lector encontrar algunos momentos de ese trajinar”, se lee en su prólogo, ya que a través de un detallado trabajo, el libro nos va revelando como los nombres de lugares, espacios, y personajes van apareciendo en la obra del escritor colombiano.
“La primera mención de Macondo puede pasar desapercibida. En el cuento ‘Un día después del sábado’, que apareció por primera vez en 1954 y hace parte del libro Los funerales de la Mamá Grande (1962), un joven desciende del tren que llega al pueblo y al ver al cura piensa sin ninguna lógica aparente que si hay cura en ese pueblo también debe haber un hotel, y entra a un establecimiento sin mirar —dice el texto— la tablilla que anuncia: Hotel Macondo».
La escritora Alma Guillermo Prieto ha escrito acerca de su experiencia con Cien años de soledad, planteando un placer y un encanto muy difícil de alcanzar:
“Ningún otro autor del siglo veinte ha conseguido internar a sus lectores de manera tan aparentemente simple en un mundo mágico y completo. Corrijo: ningún autor que no escriba cuentos infantiles lo ha logrado. Un día, en un almuerzo, García Márquez anunció que ahora sí se iba a poner a leer a J. K. Rowling, ‘para ver cómo viene la competencia'».
García Márquez siempre se consideró periodista, incluso cuando escribía sus novelas, pues explicaba que la forma de trabajar en un momento y otro cambiaban, pero él no:
“Yo diría que lo que cambia es la elaboración, el tratamiento del material. Pero, digamos, las formas de aproximación a la realidad son la esencia del periodista. En mi caso son las mismas: tanto para la literatura como para la política y para el periodismo. Entonces yo considero que mi primera y única vocación es el periodismo”.
En definitiva, Camino a Macondo es un antología que funciona como archivo y documento para aquellos que desean profundizar en la obra del Gabo, Gabriel García Márquez, el escritor colombiano más importante del último siglo.
En esta obra se podrá rastrear la conformación de un mundo y de un estilo narrativo, el realismo mágico, que durante décadas no solamente fue una forma literaria, sino más bien, se le identificó como la radiografía de como operaba la realidad en Latinoamérica.
Un libro interesante y de fácil lectura, que se instala como una guía definitiva del imaginario mundo de García Márquez.
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Martín Parra Olave es licenciado en gobierno y gestión pública de la Universidad de Chile y magíster en letras de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Imagen destacada: Gabriel García Márquez.