En este libro, y a partir de vivencias, imágenes, datos, nombres e historias en torno al llamado continente blanco, su autor, el escritor chileno Óscar Barrientos, concibe el discurso de un viajero curioso, y quien a través de sus diarios íntimo, proyecta y exhibe un maravilloso y épico lugar.
Por Cristián Brito Villalobos
Publicado el 24.5.2023
Una crónica de viaje. Un diario. Apuntes de una vivencia única en el corazón de lo desconocido. Ese lugar es la Antártica. Eso es en gran medida Cuaderno antártico (Tusquets, 2022) del escritor Oscar Barrientos Bradasic (1974).
El autor lleva nota de todo lo que ocurre y observa en una travesía única e irrepetible. Es así como en este periplo conoce e interactúa con diversas personas que se transforman en personajes que lo acompañan en el lugar más desconocido y enigmático del planeta.
Así, Barrientos construye su discurso a partir de vivencias, imágenes, datos, nombres e historias en torno al llamado continente blanco.
Mientras continúa la travesía, el escritor nos relata el accidente sufrido por la embarcación Endurance que fue literalmente atrapada por los hielos. La literatura y la ficción se insertan en el relato armónicamente.
Un asunto de consensos políticos
Es así como el capitán Luis Pardo Villalón, comandante del navío Yelcho aparece como personaje literario de un relato de la autora estadounidense Ursula K. Le Guin. Al avanzar el viaje nos topamos con más sucesos relacionados a las letras.
Así aparecen Edgar Alan Poe y Lovecraft, autores que de manera real o ficticia también fueron atraídos por este desconocido paraje, lo mismo ocurre al iniciar el diario con Francisco Coloane y posteriormente Julio Verne, entre otros nombres.
La política y los consensos jugaron un rol fundamental para anexar la Antártica a Chile.
Cuando Salvador Allende fue ministro de Salud del Presidente Pedro Aguirre Cerda consigue el logro de la fortificación de la leche que se entregaba en los consultorios con una proteína aportada por el krill antártico, debido a su preocupación como médico por la desnutrición infantil, especialmente presente en la clase obrera.
Así, el pequeño crustáceo ingeniero de los helados mares meridionales contribuyó a la infancia, y a la derrota de la inanición y de la indigencia.
Luego, en 1948 el Presidente Gabriel González Videla se transformó en el primer mandatario que llegaría a la Antártica. Estos y más datos dan vida al discurso de las notas de un viajero curioso que a través de sus diarios nos exhibe este maravilloso lugar.
Una lectura valiosa, sin duda.
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Cristián Brito Villalobos (Antofagasta, Chile, 1977), además de poeta y escritor es periodista titulado en la Universidad Católica del Norte y magíster en literatura de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
«Cuaderno antártico», de Óscar Barrientos Bradasic (Tusquets Editores, 2022)
Cristián Brito Villalobos
Imagen destacada: Óscar Barrientos.