La enigmática novelista italiana presenta una serie de textos donde expone sus primeros acercamientos con la escritura y la literatura: los autores, lugares y sensaciones que la han inspirado, y revela asimismo los secretos sobre la creación de sus historias y personajes.

Por Sofía Stark Bittencourt

Publicado el 7.4.2022

Elena Ferrante es un misterio. Además de escribir bajo pseudónimo, no da entrevistas presenciales ni telefónicas, y menos charlas o exposiciones. Únicamente sus editores italianos son quienes la conocen y gestionan las solicitudes de prensa. Para la autora basta la historia y no quién o quiénes la escriben.

En esta ocasión, los ensayos presentes forman parte de las conferencias académicas que Ferrante ha impartido en la Cátedra Umberto Eco de la Universidad de Bolonia, Italia, guardando su identidad por medio de otro quién las lee.

Si el lector busca la pluma punzante y desgarradora de Ferrante, se hallará únicamente con confesiones personales del proceso al que se enfrenta cuando tiene un lápiz y papel a la vista, la suma de las experiencias vividas y las que verdaderamente quiere transmitir, y las fuentes de inspiración que la han llevado a desarrollar las novelas a su haber.

En el primer ensayo, titulado «La pena y la pluma», Ferrante describe las dificultades que encuentra consigo misma al momento de escribir. Por un lado, explica, se encuentran los géneros literarios que otorgan cierto margen y una plataforma segura de desarrollo; mientras que por otro, se trata de un mundo que se intenta ordenar. De ambas acciones se provoca un quiebre y aparece la historia: «para mí, la escritura auténtica no es un gesto elegante, estudiado, sino un acto convulsivo».

Ferrante detalla los temas que la mueven a escribir y cómo las ideas aparecen en la mente de determinada forma, mientras que en el papel se desatan y toman una vida propia mediante las incoherencias que le otorga a los personajes. Su método se trata de un equilibrio y desequilibrio permanente pues al fin y al cabo: «la escritura hermosa llega a serlo cuando pierde su armonía y posee la fuerza desesperada de lo feo».

Escribir sobre la vida ajena o propia

¿Un novelista escribe sobre algo que quiere contar, lo que ha vivido o la vida de otros? Para la italiana, quien narra también es un espejo, ¿pero de qué?, ¿de quién? Estas interrogantes las deshila en el segundo ensayo, «Aguamarina», y se adentra en el enredo propio que significa escribir.

Quienes hayan leído sus novelas se encontrarán con sus personajes como ejemplo de este proceso. La mayoría son mujeres que se mueven en situaciones que poseen márgenes preestablecidos, historias que parecen cómodas y estables pero que de un momento a otro se derrumban y cuestionan a los personajes, a quien escribe y a quien lee.

Ante la contundencia de las sensaciones y acciones de sus personajes enfrentados a escenarios críticos y confusos, no es primera vez que Ferrante sale a explicar cuánto hay de autobiográfico en sus obras. En una entrevista vía e-mail para la sección El Club de Lectura del diario italiano Corriere della Sera, apuntaba: «si por autobiografía pretendes valerte de tu propia experiencia para nutrir una historia de invención, casi todo. Si por el contrario me preguntas si cuento mis historias muy personales, nada».

A medida que presenta sus ensayos, también expone cómo logra definir una voz propia gracias a los actos de humildad a los que se somete mediante la lectura, es decir, leer a sus autores favoritos —menciona a Diderot, Shakespeare, Woolf, Dickinson y Dante— le permiten inspirarse, y aunque lo que produzca se vea como nuevo, es en realidad parte de lo que han escrito otros.

En esta nueva entrega, Ferrante destapa su faceta más íntima y que la vuelve aún más intrigante, ya que permite entender su universo al exponer el descubrimiento que la lleva a definir su voz literaria.

La escritura entonces se mueve entre márgenes difusos, amparada en quienes ya han escrito, y una buena parte de trabajar y leer hasta encontrar la propia voz.

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Sofía Stark Bittencourt (Santiago, 1992) es periodista y se ha desempeñado en diversas áreas de las comunicaciones. Dentro de sus intereses están los deportes, la literatura, el cine, los documentales y las series. Es la creadora del blog @tengoalgopacontarte.

«En los márgenes», de Elena Ferrante (Lumen, 2022)

Sofía Stark Bittencourt

Crédito de la imagen destacada: Random House.