[Crítica] «Fantomas»: Un maestro de la suplantación de identidades

Los escritores franceses Pierre Souvestre y Marcel Allain crearon a este personaje —una figura sombría, espectral, capaz de cometer las peores villanías que se puedan imaginar— en el año 1911 a iniciativa del editor Arthème Fayard, quien buscaba una serie de novelas de aventuras para su casa impresora.

Por Eduardo Suárez Fernández-Miranda

Publicado el 9.11.2024

«Fantomas es el predilecto entre mis grandes amores villanescos masculinos: un asesino pérfido, sanguinario, desprovisto de escrúpulos o barreras morales, a quien el carácter despiadado de sus crímenes y las múltiples personalidades que es capaz de adoptar confieren una siniestra grandeza en sus desmanes, a los que hacen frente el tenaz policía Juve y el simpático periodista Fandor».
Arturo Pérez-Reverte

La labor conjunta de Zenda y Edhasa está propiciando la recuperación de grandes clásicos de aventuras que, de otra forma, hubieran quedado en el olvido de los lectores.

Bien porque llevaban mucho tiempo fuera de las mesas de novedades de las librerías, o porque, simplemente, estaban descatalogados, esta labor conjunta recupera aventuras que han hecho disfrutar a los lectores de distintas generaciones.

Títulos como La isla de coral de Robert M. Ballantyne, El jorobado de Notre Dame de Victor Hugo o Peter Pan de James M. Barrie son una magnífica muestra de la literatura de aventura de gran calidad que podremos encontrar en Zenda & Edhasa.

Fantomas, de Pierre Souvestre (1874 – 1914) y de Marcel Allain (1885 – 1969), es otro de los títulos que podemos disfrutar en esta colección.

Los escritores franceses crearon a Fantomas en el año 1911 a iniciativa del editor Arthème Fayard, quien buscaba una serie de novelas de aventuras para su editorial.

 

Fenómeno de masas

Souvestre y Allain presentaron el personaje de Fantomas como: «una figura sombría, espectral, capaz de cometer las peores villanías que se puedan imaginar. Un hombre sin identidad, con la pericia de convertirse en cualquiera; un maestro del disfraz, del robo, del chantaje, de la suplantación de identidades».

En aquella época ya había un precedente a una figura de este calibre: Arséne Lupin, creado, por el también escritor francés Maurice Leblanc, seis años antes. Este hecho no impidió que Fantomas se convirtiera en un fenómeno de masas, cuya popularidad trascendió los estratos sociales y culturales.

Fueron más de treinta novelas las que relataron las trepidantes aventuras de este personaje mítico. Tal fue su éxito que muy pronto un incipiente séptimo arte se hizo eco del fascinador personaje. El cineasta francés Louis Feuillade fue el primero adaptar la novela en 1913.

Cinco películas trasladaban al espectador sus espectaculares villanías: Fantomas, Juve contra Fantomas, La muerte que nos mata, Fantomas contra Fantomas y El falso magistrado.

Ahora tenemos la oportunidad de redescubrir con la primera novela de la serie a Fantomas: «Héroe y antiéroe, villano, asesino, caballero, malhechor y muy francés».

 

 

 

 

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Eduardo Suárez Fernández-Miranda nació en Gijón (España). Licenciado en derecho por la Universidad de Sevilla, está realizando sus estudios de doctorado dentro del Departamento de Literatura Española e Hispanoamericana de la misma casa de estudios superiores.

Colabora como crítico literario en las revistas españolas El Ciervo, Serra d’Or, Llegir.cat, Gràffica y Quimera, donde lleva a cabo una serie de entrevistas a escritores, editores y traductores, nacionales y extranjeros.

Asimismo, escribe para las publicaciones americanas Cine y Literatura (Chile), La Tempestad (México), Continuidad de los Libros (Argentina) y Latin American Literature Today (University of Oklahoma). También, colabora de forma ocasional en los diarios asturianos El Comercio y La Nueva España.

 

«Fantomas», de Pierre Souvestre y Marcel Allain (Zenda-Edhasa, 2024)

 

 

 

Eduardo Suárez Fernández-Miranda

 

 

Imagen destacada: Pierre Souvestre y Marcel Allain.