La nueva obra del autor nacional Álvaro Paredes Oyarce —egresado de derecho y estudiante de teología evangélica— y la cual ha sido publicada en la colección RedLine, del prestigioso sello editorial independiente NoteBook Poiesis, cuestiona la desconexión que tendría la materia de la modernidad racional, ante el fenómeno de la religiosidad cristiana y occidental.
Por Arianne van Andel
Publicado el 3.12.2023
El poemario Hojas de higuera, de Álvaro Paredes Oyarce (Santiago, 1983), es especial. Es el resultado desbordado de un ejercicio en un curso de eco-teología que impartí hace un año, donde pedí conectar la propia fe y autobiografía con la ecología y el territorio.
Álvaro volvió de esta tarea, no solo con un escrito profundo y hermoso, sino con una inspiración poética que es plasmada en estas páginas.
El volver a la tierra hace lo suyo, porque la poesía ecológica teológica, o eco-teo-poética, que se encuentra acá, re-coloca, da un nuevo lugar, a mucha de la teología tradicional, discursiva, y aburrida. Álvaro logra encontrar palabras que dejan caer en pedazos lo que ya no sirve de mucha religiosidad desencarnada, e inspira las piezas caídas con un nuevo sentido.
Los poemas llevan las huellas de varios filósofos y teólogos críticos de la modernidad racional, occidental y colonialista; son nombrados y honradas a lo largo de la obra: Vattimo, Mistral, Anzieta, Spinetta, Rokha, McFague, entre otros. Sus ideas, sin embargo, se materializan de otra manera, tocan tierra, se hacen sentir en sus consecuencias creadoras de nuevos imaginarios.
En un tiempo en que el lenguaje está usado cada vez más para simplificar y polarizar, este trabajo eco-teo-poético nos devuelve la expresión de los matices, los contrastes, y los sentimientos más profundos de conexión con la memoria, la naturaleza y la transcendencia.
La espiritualidad en su sentido corporal
El autor sabe, como nadie, reflejar, y así superar, las dicotomías y quiebres de nuestra existencia, entre tú y yo, entre cuerpo y espíritu, entre nosotros, las otras especies y Dios.
Pero este camino no es sin confrontación, pues Paredes Oyarce cuestiona profundamente la desconexión del territorio y de la materia de la modernidad racional y la religiosidad cristiana occidental, que: «no sabe hablar con los pájaros, los árboles, el viento». Es una experiencia que remueve certezas y pone patas arriba mitos y frases que pensábamos comprender. Pero mientras tanto, regala sonrisas.
Las frases acá inscritas, a veces espacialmente, invitan a un ir y venir y sentir, como dice el mismo poeta, masticando, escupiendo, saboreando, deleitando. Reconocemos, las personas que venimos de la tradición cristiana bíblica, muchas metáforas, entre ellas la misma higuera, que representa la fuerza de la vida al mismo tiempo que la capacidad humana de corromperla, venderla, maldecirla.
Sin embargo, los poemas develan lados de estas metáforas que no habíamos visto, por mezclarlas con el barro y los líquidos de la tierra y nuestros propios cuerpos tierra. Se caen en estas hojas las idealizaciones, abstracciones y romanticismos religiosos, por su insoportable razonabilidad.
Por otro lado, sopla, entre líneas, el viento de la Ruaj, bellísimamente retratada en más que una frase: “No tengo EXISTENCIA, creadme, sopladme y déjame INTERVENIR».
Y se crea una eco-teo-morfia, una teología que «salva el mundo de tanto sentido», que da vuelta a los sentidos comunes, que más que la logia O palabra surge desde la morfia —la cualidad de cambiar de forma. Así resucita la nostalgia y la ternura por la vida—.
Leer estos poemas es una experiencia mística, tocando el borde, la vulnerabilidad y la espiritualidad en su sentido más auténtico y corporal.
Saldrás diferente a como entraste.
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Arianne van Andel es eco-teóloga y teóloga feminista holandesa de tradición reformada, magister en teología Sistemática por la Universidad Libre de Amsterdam y certificada en Coaching Organizacional por la Universidad Alberto Hurtado en Santiago.
En la actualidad se desempeña como profesora en la Comunidad Teológica Evangélica (CTE) y en el Seminario Metodista en Chile, y además es activista en diferentes movimientos ambientales en Latinoamérica.
Imagen destacada: NoteBook Poiesis.