Gracias a este esfuerzo investigativo de la periodista trasandina Leila Guerriero, el lector puede conocer las formas y consecuencias de una conflagración absurda, y la cual hundió y marcó para siempre a toda una generación de hombres y mujeres argentinos.
Por Martín Parra Olave
Publicado el 26.7.2021
La periodista y escritora Leila Guerriero (Junín, 1967) se ha caracterizado por escribir crónicas y reportajes sobre temas incómodos y que generalmente abordan problemas de carácter político y social.
Su salto al reconocimiento fue con la investigación llamada El rastro de los huesos donde relata el trabajo del equipo de antropólogos argentinos que realiza la búsqueda y reconocimiento de los detenidos desaparecidos durante la dictadura trasandina.
Ha recibido una serie de premios a nivel internacional por su trabajo, entre los que destacan el Premio Gabo (2010) y el Premio de Periodismo Manuel Vásquez Montalbán (2019).
La guerra de Malvinas fue un conflicto que enfrentó a la Argentina y el Reino Unido durante 1982, cuando tropas argentinas desembarcaron en las islas, tomando por sorpresa a la guarnición de Port Stanley.
Por medio de esta acción inesperada, los militares argentinos desalojaron a las autoridades británicas y establecieron una gobernación bonaerense. Si bien la invasión fue un intento de la dictadura para perpetuarse en el poder, se basó en el deseo de gran parte del pueblo argentino de recuperar unas islas usurpadas por Gran Bretaña en 1833.
La respuesta del gobierno británico, encabezado por la primera ministra conservadora Margaret Thatcher, fue condenar la invasión y enviar una poderosa flota para recuperar las islas. El enfrentamiento entre ambos países finalizó el 14 de junio cuando Argentina se rindió definitivamente.
“Al terminar la guerra miles de soldados regresaron a sus casas, pero salvo excepciones, el Estado no notificó oficialmente la muerte de quienes no volvieron. Días tras día, semana tras semana, cientos de familiares recorrieron los cuarteles buscando al muerto vivo, al despedido al pie de un autobús semanas antes” (p. 10).
¿Qué sucedió con los que no volvieron? ¿Dónde quedaron sus cuerpos? ¿Cuál fue la respuesta del gobierno argentino? Son algunas de las interrogantes que intenta responder el trabajo de Leila Guerriero, quien nos va a revelar lo que realmente sucedió con los cuerpos de estos soldados muertos en batalla.
Casi como una novela de detectives, la narración nos adentra en los secretos sucesos que rodearon el destino de estos combatientes, que fueron enterrados en las Malvinas por soldados británicos que no sabían muy bien que hacer con aquellos cuerpos.
El oficial Geoffrey Cardoso fue el encargado de realizar esta labor: “encontró un lugar en el istmo de Darwin. Ejerciendo un oficio fúnebre para el que no tenía entrenamiento, recogió cadáveres insepultos, exhumó los sepultados, revisó uniformes buscando documentos, carnets, placas identificatorias: los rastros de la identidad esquiva”, luego realizó un exhaustivo documento, un informe donde detallaba todo su trabajo.
Sin embargo, y a pesar que esta información llegó al gobierno militar, nunca se hizo ninguna gestión para traer al continente los restos de los caídos y menos informar a sus familiares.
A pesar de lo breve que puede parecer esta crónica, el trabajo que nos presenta Guerriero, es un profundo ensayo sobre el desprecio que han tenido los distintos gobiernos argentinos con parte de aquellos soldados que murieron en nombre de la patria.
En este sentido, La otra guerra es una emocionante y sentida obra narrativa, que toca temas y procesos dolorosos que han tratado de ser silenciados por años.
Gracias a este esfuerzo investigativo, el lector puede conocer las formas y consecuencias de una guerra absurda, que más que salvar a una clase militar dominante, hundió y marcó para siempre a toda una generación de hombres y mujeres sudamericanos.
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Martín Parra Olave es licenciado en gobierno y gestión pública de la Universidad de Chile y magíster en letras de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Actualmente cursa el doctorado en literatura de la última Casa de Estudios.
Crédito de la imagen destacada: Victoria Iglesias.