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[Crítica] «No somos nadie»: Los símbolos dramáticos de la intimidad

La compañía El Habitante Teatro presentó este logrado híbrido a medio camino entre lo teatral y lo audiovisual, a través de la plataforma Youtube durante este mes. El texto que presentamos a continuación, corresponde a lo apreciado por nuestra redactora en la función desarrollada el día jueves 17 de diciembre.

Por Jessenia Chamorro Salas

Publicado el 22.12.2020

Esta pieza teatral y audiovisual, con tintes de cortometraje y de experimentación dramática, escrita y dirigida por Christian Arend Barría, y producida por Josefa Moraleda, se presentó en formato virtual en tres fechas del mes de diciembre (3, 10, y 17), utilizando el canal de Youtube de la compañía, y la plataforma Zoom, tópico frecuente del teatro de este 2020 pandémico.

Este híbrido teatral y audiovisual se posiciona desde una zona fronteriza no solo en su formato, sino también en su propuesta escénica, la cual ha sido elaborada desde la investigación de un lenguaje digital.

El Habitante Teatro se concibe como: “un grupo diverso y auto gestionado formado en el año 2015, con el objetivo de articular teatralmente temas contingentes verídicos contados a partir de la ficción, desde una perspectiva donde predomina la creación de la dramaturgia”.

Objetivo que en No somos nadie despliega nuevas estrategias para vincularse al espectador, a fin de tocar temas complejos, y por último experimentar en nuevos lenguajes artísticos y teatrales.

Siempre con el foco en problemáticas humanas, sociales y culturales, lo cual queda en evidencia en esta realización, la cual aborda el tema de la marginalidad, específicamente las infancias marginales y marginalizadas.

Infancias ultrajadas y vulneradas, en donde el abandono, el abuso y la violencia operan como mecanismos de coacción brutales, en “cuerpos menores” marginalizados, resultado de una serie de dispositivos de poder que se imponen sobre ellos opresivamente.

Los personajes de esta pieza vagan por la ciudad, se hayan en lugares ominosos intentando escapar de las realidades que los atormentan, de su presente y pasado oscuro.

Con una mirada intimista, simbólica y a que a veces produce cierto extrañamiento, la dirección y producción de No somos nadie se centra en las subjetividades y experiencias disruptivas de los personajes que interactúan con demonios ajenos y propios en cada uno de los cuadros que componen la pieza.

La ciudad, la noche, las “otras infancias y adolescencias” cernidas por su marginalidad, se articulan en la obra como problemáticas normalizadas sobre las cuales es necesario y urgente reflexionar.

No somos nadie presenta una serie de cuadros y fragmentos que tensionan la realidad actual, poniendo el acento en problemáticas sociales invisibilizadas y normalizadas, como las infancias marginales, a través de una “puesta en escena/pantalla”.

Esta opción estética busca generar sensaciones diversas y emociones contradictorias por medio de disonancias sonoras y visuales que caracterizan el montaje y la escenificación de los espacios, en donde el uso de una gama de colores altisontantes, una musicalización a ratos incómoda, e imágenes atiborradas de sentido, remarcan el significante y los objetivos de la pieza.

La obra, así, se estructura como una narración no lineal de distintas historias articuladas en una, promoviendo interpretaciones abiertas y diversas sobre los cuadros de la composición.

La propuesta escénica y virtual de No somos nadie, finalmente, subraya la necesidad de abrir el formato sin perder la quintaescencia de los códigos teatrales, habitando zonas fronterizas del lenguaje, de las imágenes y de las problemáticas presentadas.

 

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Jessenia Chamorro Salas es licenciada en lengua y literatura hispánica de la Universidad de Chile, profesora de lenguaje y comunicación de la Pontificia Universidad Católica de Chile, magíster en literatura latinoamericana de la Universidad de Santiago de Chile, y doctora (c) en literatura de la Universidad de Chile.

Igualmente es redactora estable del Diario Cine y Literatura.

 

 

 

 

Montaje «No somos nadie»

 

Ficha artística:

Dirección y dramaturgia: Christian Arend Barría

Elenco: Daniela Lara, Bastián Panades Rojas, Christian Arend Barría.

Operador técnico: Fabián Castillo Araya.

Gráfica: Piera Gerli.

Producción: Josefa Moraleda.

Funciones: Jueves 3, 10 y 17 de diciembre a las 21:00 horas.

 

 

Imagen destacada: El Habitante Teatro.

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