La novela de la desaparecida escritora brasileña Nélida Piñón responde a los códigos estéticos de una historia de descensos de la condición existencial llena de dolor, de sufrimiento, de opresión, de desamor, de pasiones prohibidas y de una pobreza insultante hacia sus personajes principales.
Por Sergio Inestrosa
Publicado el 24.1.2023
Un día llegaré a Sagres (Alfaguara, 2021) es la historia de Mateus, pero a través de su historia personal se nos devela la trayectoria de un país, de una lengua, y de una aventura cultural, y espiritual fundada en el poema épico Os Lusíadas escrito por Luis de Camões, el gran poeta portugués que está a la misma altura de Shakespeare y de Cervantes.
La novela es la historia de la búsqueda de la identidad que nos da, a cada uno, la lengua, más allá de las miserias sociales, económicas y políticas que se generan en un país o nación a causa de los malos gobiernos políticos.
El poeta lisboeta Fernando Pessoa lo expresó con inigualable certeza al decir que su patria era la lengua portuguesa y Nélida Piñón (1937 – 2022) en esta novela lo ratifica, pues a través de sus páginas nos asomamos al corazón adolorido de ese campesino de nombre Mateus, sin apellido, gracias a su magistral forma de relatar, enhebrando con gran destreza los múltiples hilos de los tejidos propios del alma humana.
De esta forma, el personaje central y narrador de la historia, Mateus, nació durante el siglo XIX en Minho, una aldea pobre del norte de Portugal, frontera con Galicia, y es hijo de una prostituta y de un padre desconocido.
Al niño y adolescente Mateus lo crío su abuelo Vicente, de quien aprende lo que es la vida, el anciano lo manda a la escuela y allí se enciende su imaginación gracias al profesor Vasco da Gama, homónimo del famoso navegante portugués.
Cuando el abuelo muere, y la madre regresa a casa, el joven emprende un viaje en dirección al sur, a Sagres, en busca de la utopía representada por las conquistas del imperio portugués, por ese camino el Mateus experimenta la grandeza, las debilidades y las miserias del ser humano, en un país pobre pero que de alguna manera aspira a la libertad épica de un pasado glorioso.
La novela es una historia de descensos de la condición humana llena de dolor, de sufrimiento, de opresión, de desamor, de pasiones prohibidas y de una pobreza insultante.
Así, la obra de Piñón nos lleva, como en La comedia de Dante, siempre hacia abajo, al sótano de la miseria de nuestras acciones, en dirección a un precipicio espiritual cada vez más profundo, aunque a veces haya destellos de luz.
La magia de Nélida Piñón
En esta novela lo que empieza como la decisión de Mateus de huir para siempre de su región, termina siendo un medio para explorar y confesar el sufrimiento de los seres humanos, un medio para descubrir lo difícil que es la vida y las relaciones interpersonales.
Mateus logra llegar a Sagres, pero no encuentra esa utopía y por el contrario vive una serie de experiencias que marcarán su alma para siempre. De esos acontecimientos nos enteramos poco a poco, a través de la confesión que el protagonista nos hace, cuando se siente morir y es rescatado por el afecto y la comprensión de una mujer de otra cultura, que ha sufrido en carne propia el oprobio y la maldad de sus semejantes.
A través de sus narraciones y deliberaciones, Mateus parece decirnos que sin historia no se puede ser, ni se puede vivir, como tampoco se puede existir sin unas pocas personas que conforman ese tejido humano, de afectos y de simpatías que necesitamos para poder respirar plenamente.
Carlos Fuentes dijo que, la magia de Nélida Piñón consiste en unir imaginación y compasión para dar a sus personajes y sus lectores una piel con la misma temperatura que la de ellos.
Y otros críticos han enfatizado que Piñón no solo es una de las más grandes escritoras en lengua portuguesa de su tiempo, sino que una de las más relevantes narradoras en el panorama internacional durante la segunda mitad del siglo XX.
Asimismo, el autor nicaragüense Sergio Ramírez ha dicho, con ocasión de la muerte de la artista de origen español (por sus padres), ocurrida en Lisboa el 17 de diciembre del 2022, que su voz le dio un registro profundo a la nueva novela de la literatura concebida en lengua portuguesa.
Por todo esto, quiero poner a la consideración del lector de Cine y Literatura la última obra de ficción que Nélida Piñón escribió, Un día llegaré a Sagres (2021) y la cual es una novela excepcional, estructurada además a partir de capítulos muy breves.
Además, por si el lector o lectora necesita otro empujoncito para animarse a leer estas páginas, sepa que la desparecida autora portuguesa recibió el Premio Nacional PEN Club de Literatura y el Príncipe de Asturias de la disciplina, y también fue la primera mujer en ocupar la presidencia de la Academia Brasileña de Letras.
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Sergio Inestrosa (San Salvador, 1957) es escritor y profesor de español y de asuntos latinoamericanos en el Endicott College, Beverly, de Massachusetts, Estados Unidos, además de redactor permanente y miembro del comité editorial del Diario Cine y Literatura.
Imagen destacada: Nélida Piñón.