La destacada autora e investigadora de la Premio Nobel de Literatura 1945 presentó su volumen «La palabra elemental», en el contexto de la reciente Feria del Libro de La Serena, una obra que compila diez discursos públicos y fundamentales, en el pensamiento tanto político como social de la inmensa creadora de «Desolación».
Por Cristián Brito Villalobos
Publicado el 27.12.2022
Este mes de diciembre se cumplen 77 años desde que Gabriela Mistral fue distinguida con el Premio Nobel de Literatura, convirtiéndose en la primera persona nacida en Latinoamérica, en la quinta autora y en la única mujer de la lengua castellana que lo ha recibido.
La Academia Sueca argumentó como las razones del Nobel a la artista chilena, que: «su poesía de desbordadas emociones y el haber hecho de su nombre un símbolo de las aspiraciones idealistas de todo el continente latinoamericano».
Sin duda, esta fecha es la más relevante de las efemérides que se celebran de Gabriela Mistral, pues en sus palabras: «es la literatura en donde reside y se escribe la verdadera historia».
Claudia Reyes García, escritora y biógrafa de Gabriela Mistral, presentó en la Feria del libro de La Serena la edición remasterizada del libro Gabriela Mistral. La palabra elemental de Editorial Letrarte, y en cuya selección trabajó conjuntamente con el poeta Benjamín León.
La obra compila diez de sus discursos públicos, que se presentan en el orden cronológico con su fecha de escritura y que se complementan con notas bio-bibliográficas que permiten contextualizarlos frente a las circunstancias del tiempo histórico en que fueron redactados y también entregar una panorámica biográfica de la poeta, maestra, intelectual y diplomática chilena.
El volumen abarca desde la «Educación popular», señalado por la propia Gabriela Mistral como su primer discurso público, pronunciado en Punta Arenas en 1918, hasta el «Mensaje por los derechos humanos», leído en Nueva York el 10 de diciembre de 1955, último acto al que asiste la poeta junto a otras intervnciones públicas que incluye el texto.
«Mistral nunca publicó sus escritos de prosa en un volumen»
—Gabriela Mistral es reconocida mundialmente como poeta, sin embargo, su obra en prosa es poco difundida, ¿a qué crees que obedece este fenómeno?
—Se debe, principalmente, a que Gabriela Mistral nunca publicó sus escritos en prosa en un volumen. Estas contribuciones aparecieron en diarios y revistas de América y Europa, durante 50 años, sin embargo, las primeras compilaciones fueron publicadas luego de su muerte.
De allí que no hayan tenido la resonancia que tuvo su obra poética reconocida universalmente con el Premio Nobel de Literatura.
Valga decir que este año celebramos el centenario de su primer libro Desolación, que posesionó su voz en las letras hispanoamericanas y que cada día más, gracias al trabajo de investigadores que se han dedicado desde la década de 1950 del siglo pasado, a reunir y publicar sus artículos, reseñas, recados y motivos en prosa, se ha ido expandiendo y creciendo el interés y valoración de su pensamiento, que es su escritura en prosa.
«La infancia en el Valle de Elqui es fundamental para la comprensión de su obra»
—Gabriela Mistral fue una intelectual que jamás negó sus orígenes. En este sentido, ¿qué importancia tiene su hábitat en su obra.
—La infancia de Gabriela Mistral en Montegrande, en el Valle de Elqui, de los tres a los once años, es fundamental para la comprensión de su vida y de su obra.
En esa ‘aldea de treinta casas’ donde su escuela fue también su casa y aprendió de su medio hermana Emelina las primeras letras y de su madre Petita a nombrar los seres de la naturaleza, constituyen un anclaje de paisaje geográfico y humano, espiritual y social, que se puede observar en su obra poética y que en sus textos en prosa y epistolarios que ella misma narrará hasta el fin de sus días.
No en vano por su voluntad testamentaria descansa hoy en su amado pueblo de Montegrande.
—La palabra elemental reúne diez discursos públicos escritos por Gabriela Mistral, todos profundos y significativos, pero, ¿cuál es el que consideras más relevante?
—La reunión misma es una selección, no tengo uno predilecto o que considere de mayor relevancia, pues en cada uno aborda materias distintas y cada uno corresponde a una circunstancia histórica y de vida, sin embargo, creo que «¿Cómo hago mis versos?» es su manifiesto poético. Y que «El mensaje por la paz y la democracia» es una lectura casi obligatoria para nuestro tiempo.
«Gabriela Mistral en Chile es solo una efeméride»
—¿A qué cree que obedece el poco reconocimiento a la figura de la Premio Nobel en Chile en comparación a otros países como México?
—Pienso a que se debe a la falta de políticas públicas en educación. Gabriela Mistral en Chile es solo una efeméride y lamento mucho que así sea.
—En esta misma línea, poco se sabe del relevante papel que desempeñó Gabriela en la reforma educacional mexicana, ¿en qué consistía y cuál es su importancia?
—Creo que aún se desconoce más el accionar pedagógico que desarrolló Gabriela Mistral durante los veinte años previos a su trabajo en la reforma educativa azteca, en escuelas y liceos de nuestro país, un verdadero periplo que la llevó desde Antofagasta a Punta Arenas, haciendo clases, alfabetizando a adultos, fundando bibliotecas, abogando por la educación de la mujer, los derechos de la infancia e innovando pedagógicamente, además de desarrollar una espléndida carrera literaria.
Es por esta labor que el gobierno de la posrevolución mexicana la contrata para la Reforma Educacional, de la cual Gabriela Mistral fue la figura principal y un símbolo.
La maestra de América y la intelectual del siglo XX se configuran en esos veintiún meses mexicanos. Sin embargo, hay dos décadas previas que es necesario conocer.
La paz del Presidente Boric
—El Presidente Gabriel Boric cita constantemente a Gabriela Mistral, ¿qué importancia le das a que el Primer Mandatario se base en las palabras de la Premio Nobel para sus discursos públicos?
—Más allá de citarla, pues creo que todos los últimos presidentes y presidenta de Chile, lo hicieron en alguna ocasión, Gabriel Boric es un auténtico lector de Gabriela Mistral, desde el colegio, y en general de poesía chilena.
Ha citado también a Enrique Lihn y a varias otras voces de nuestra literatura. Creo que el Presidente encuentra paz en Gabriela Mistral. Y como ella bien dijo: ‘la paz no es la jalea dulzona que algunos piensan’.
—¿En qué trabajas sobre Gabriela Mistral?
—En dos áreas, la primera profundizando en lo constitutiva que fue su infancia para un capítulo de la biografía extensa que preparo y que se llama La niña de Montegrande y además trabajo sobre la relación e influencia del pensamiento y la obra educativa de Faustino Domingo Sarmiento en Gabriela Mistral.
Ella dijo, a propósito de la reforma educacional mexicana, que la gesta educativa mexicana de Vasconcelos de principios del siglo XX, sólo era comparable a la del gran Sarmiento en el siglo XIX.
Y tenía razón.
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Cristián Brito Villalobos (Antofagasta, Chile, 1977), además de poeta y escritor es periodista titulado en la Universidad Católica del Norte y magíster en literatura de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Imagen destacada: Claudia Reyes García.