Este volumen rescata a una vigorosa tradición de vanguardia, iniciada en Sudamérica con Augusto de Campos, fundador en São Paulo del grupo de poesía Noigandres (1952), quien a través de su revista homónima influyó hondamente en diversos poetas de la región, en un camino creativo iniciado antes por el chileno Vicente Huidobro.

Por Francisco Morales Rojas

Publicado el 28.8.2019

Juegos i guiños (2015), sexta obra publicada del poeta y artista visual Guillermo Daghero (Oliva, Provincia de Córdoba, 1967), nos traslada sin ambages a la escuela de la poesía concreta, cuyas aspiraciones residen en la materialidad y visualidad que sostienen al mensaje poético, no tanto así en el verso, la métrica o la sintaxis, componentes más o menos esenciales de producción y apreciación poética tradicional.

De allí que Daghero comprima con afán la sucesión —a veces caótica, pretendidamente caótica— de frases y de caracteres disgregados por sus páginas, las que alternan el castellano, el francés y el lunfardo. Tienen cabida la experimentación con los márgenes y símbolos, los tamaños de fuentes y la inclusión de fotografías que sintetizan ejercicios precedentes, recursos todos que validan la permanente apuesta gráfica del autor de la eme (2000) y eme otra (2014). En tal sentido, refiere Daghero en el programa El Invitado de RFI (2019), a propósito de una exposición retrospectiva que el Museo de Bellas Artes de Córdoba realizó con su trabajo: «No me gusta mi escritura. No me gusta cómo escribo a mano alzada. Entonces, uso moldes […] quise caer en una historia anterior que es la de armarla letra por letra, y eso me posibilita equivocarme, y a través de esas equivocaciones, empezar a arreglar eso que se rompió, y tratar de armar algo […] que por ahí sea netamente visual […] también hay fragmentos, también hay palabras que quieren decir varias cosas».

La palabra juego y sus ramificaciones (joueur, jugador, jugar, fuguemos) son sin duda el principal leitmotiv y afirmación estética de la obra: «juego / luego / fuego / ego / ego / ego». Otra tesis examina al lenguaje en sí, sustrato mismo de la puesta en escena de Juegos i guiños: «el lenguaje / indisponible / está / al jugar con la / palabra / que se tiene en la punta de la lengua / _ le nom sur le bout de la langue _, no / juego a / equívocos / ello / fallo / callo».

Juegos i guiños rescata una vigorosa tradición de vanguardia, iniciada en Sudamérica con Augusto de Campos, fundador en São Paulo del grupo de poesía Noigandres (1952), que a través de su revista homónima influyó hondamente en diversos poetas de la región. En Argentina, la poesía concreta fue instituida por Edgardo Vigo, artista conceptual de quien Daghero se considera tributario: «Él (Eduardo Vigo) fue la persona que me abre este camino, pues a través del arte correo puedo mover estos textos visuales fuera del ambiente típico que tenía la poesía, porque la poesía era ir a presentarse en un concurso para poder publicar […] los concursos son mínimo 500 versos, y con esto de la poesía económica o concreta, no llegaba nunca». De Chile, su mayor influencia es Juan Luis Martínez, apuntado en la sección guiños como «j.l.martínez», quien figura entre otros junto a Décio Pignatari (brasileño cofundador de Noigandres).

Y es imposible no establecer similitudes entre Juegos i guiños y La nueva novela (obra por antonomasia del magno poeta de Valparaíso), al menos en el ímpetu vanguardista de trascender las convenciones y desplegar imágenes poéticas valederas en soportes no convencionales, gráficos, geométricos: «el lenguaje / indisponible / está / al jugar / jouer / leg godt / incursiono».

Francisco Morales Rojas nació en Santiago en 1992. Egresado de Derecho (Universidad Central de Chile), ha participado en talleres literarios en la Corporación Cultural Balmaceda Arte Joven y en la Sociedad de Escritores de Chile (SECH), gremio en el que actualmente dirige la Comisión de Talleres y al cual representa ante la Política Nacional de la Lectura y el Libro 2015 – 2020 (PNLL) en su Comisión de Creación. Ha dirigido talleres de narrativa en colegios de Maipú y Santiago. Matanzas (Narrativa Punto Aparte, 2019) es su primera novela.

«Juegos i guiños», de Guillermo Daghero (Pequeño Dios Editores, Santiago, 2015)

Una página de «Juegos i guiños», de Guillermo Daghero

Francisco Morales Rojas

Imagen destacada: El poeta y artista visual argentino Guillermo Daghero.