La editorial Paidos y el grupo Planeta lanzan un volumen fundamental para las ciencias sociales contemporáneas en general y el cual constituye una fiel reproducción del título publicado por el eminente autor bielorruso hace casi un siglo.
Por Nicolás Poblete Pardo
Publicado el 11.6.2020
Pensamiento y lenguaje (Paidós/Planeta, 2020), de Lev Vygotsky, es una publicación que atraerá a interesados en el lenguaje, la psicología, la semiología, le biología y todas sus intersecciones. Se trata de un documento que ha adoptado el aura de un tesoro desenterrado, después de casi un siglo de conflictos y adversidades. El inmenso legado de Vygotsky se ve aquí, de manera destilada, en su ya pergamino de rigor.
La edición recién lanzada por la colección de Paidós es un cuidado homenaje al eminente bielorruso, e incluye la portada original en ruso, publicada en 1934, y una necesaria y excelente introducción que nos sitúa en el contexto socio-histórico de Vygotsky y nos acerca a su persona, un: “estudioso de los campos literarios, filosófico y estético”, dedicado de lleno a la psicología a los 28 años y muerto de tuberculosis un decenio después. Vygotsky: “fundó y dirigió varios laboratorios de investigación, entre los que se encontraba el primer Instituto Ruso para el Estudio de Niños Discapacitados”.
Esta descripción nos habla del carácter visionario de Lev; también de las dificultades para surgir en su país, dado su bagaje familiar judío de clase media. Típicamente, su camino no fue de lo más expedito, considerando el transversal antisemitismo que recorre el globo, también en ese momento. De hecho, su temor era no poder ingresar a la universidad, ya que el cupo para judíos era de un 3 %. Más aún, en ese intertanto, una nueva orden ejecutiva del ministerio de Educación, dada en 1913, puso en peligro incluso esas esperanzas: “pues, aunque mantenía la cuota, exigía a que los aspirantes judíos fueran matriculados a suertes, haciendo la admisión no una cuestión de dotes intelectuales, sino de puro azar”.
Lo que vino después, histórica y personalmente, tampoco fue fácil. Stalin estaba endureciendo el control del partido sobre los elementos periféricos de la cultura y la ciencia. El programa de investigación de Vygotsky caía, entonces, dentro de teorías y métodos “burgueses”, tal como el psicoanálisis, la psicología gestáltica y el análisis comparado de la conciencia en diversas culturas: “Todas estas tendencias eran tildadas de antimarxistas”.
“Vygotsky previó de modo casi profético la concentración de los sistemas psicológicos en torno a los polos opuestos del conductismo y la fenomenología”, leemos en la introducción. Con honda introspección, Vygotsky explicaba que: “la estructura del desarrollo del comportamiento se parece, hasta cierto punto, a la estructura geológica del núcleo de la Tierra. La investigación ha establecido la presencia de estratos genéticamente diferenciados en el comportamiento humano”.
La fenomenal introducción de Alex Kozulin (Universidad de Boston) nos provee el contexto para entender el estar, el malestar y el bienestar, que ronda a la figura de Vygotsky, quien dedicó sus energías a investigar el lenguaje en relación con el pensamiento: “El pensamiento y el habla tienen raíces diferentes, que sólo se funden en un determinado momento de la ontogénesis, después del cual estas dos funciones se desarrollan juntas bajo una influencia recíproca”.
El estudio mismo es una densa selva analítica y Vygotsky plantea su proyecto como una investigación grupal, preocupándose de citar y dialogar con innumerables investigadores del área, notablemente Piaget, Stern, Köhler. Este libro es un rescate que interesará no solo a quienes gravitan en el área de la piscología, sino a quienes nos preguntamos por las palabras, su sentido y sus relaciones. Una de las fascinantes introspecciones de Vygotsky nos habla de ese mismo espíritu de indagación: “¿Cuáles son las leyes que gobiernan la formación de familias de palabras?”.
Un estudio que nos lleva al origen de nuestra habla, así como de nuestro cuerpo celular y socio-cultural: “La palabra es expresión directa de la naturaleza histórica de la conciencia humana”, argumenta. Y concluye con un tono poético, casi mágico: “La conciencia se refleja en una palabra como el sol en una gota de agua… Una palabra es un microcosmos de la conciencia humana”.
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Nicolás Poblete Pardo (Santiago, 1971) es periodista, profesor, traductor y doctorado en literatura hispanoamericana (Washington University in St. Louis).
Ha publicado las novelas Dos cuerpos, Réplicas, Nuestros desechos, No me ignores, Cardumen, Si ellos vieran, Concepciones, Sinestesia, y Dame pan y llámame perro; y los volúmenes de cuentos Frivolidades y Espectro familiar, y la novela bilingüe En la isla/On the Island. Traducciones de sus textos han aparecido en The Stinging Fly (Irlanda), ANMLY (EE.UU.), Alba (Alemania) y en la editorial Édicije Bozicevic (Croacia).
Asimismo, es redactor permanente del Diario Cine y Literatura.
Imagen destacada: Planeta de Libros.