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«Perro Bomba»: Una verdad incómoda

La ópera prima del realizador nacional Juan Cáceres es un filme que escarba en la xenofobia y en el racismo capitalinos para exhibir sin tapujos una cruda realidad que ocurre frente a nuestras narices diariamente. Probablemente será una obra audiovisual que gustará poco (espero que no) y a la que no reconocerán inmediatamente sus virtudes artísticas (también espero que no), pero que sin duda las tiene y el tiempo así lo demostrará. No se la pierda: se estrena este jueves 3 de octubre.

Por Felipe Stark Bittencourt

Publicado el 30.9.2019

Steevens Benjamin presta su nombre y persona para interpretar a un joven haitiano que luego de una pelea con un jefe racista se ve abandonado por todo el mundo. Lo echan de su casa, lo desprecian en la calle y apenas encuentra compañía. Se enfrenta cara a cara con la discriminación, la pobreza y el abuso de poder. En sus caminatas por un Santiago descompuesto y sucio se topa, pues, con una sociedad que le ha dado la espalda y cuyo parecido con la nuestra resulta alarmante.

El Diccionario chileno recoge la expresión “perro bomba” como un término carcelario que significaría algo así como “carne de cañón”, aquel a quien envían a morir sin ninguna conmiseración. En esta ópera prima, el director Juan Cáceres lo utiliza adecuadamente, presentándolo con gran verosimilitud gracias a una economía de recursos que permite, sin embargo, un despliegue dinámico de la acción, manteniendo el argumento sin bajones y privilegiando un foco intimista que no choca con el distanciamiento de la cámara.

Esto se ha conseguido gracias a un excelente empalme de ficción y realidad que funciona orgánicamente y sin mayores tropiezos, cuya autenticidad se percibe en un montaje que hace evidente el primer aspecto, pero en cuya implicancia política hace aún más claro su aspecto documental y, por lo tanto, el problema que trata. Es un ejercicio de desdramatización que se acopla bastante bien a la subjetividad de su protagonista, a los segmentos musicales que comentan sus vicisitudes y a los pensamientos que atraviesan por su mente solitaria y abandonada.

No es un movimiento fácil, pero Perro Bomba (2019) la logra con gracia, acercándonos a lo más deplorable del ser humano y al entendimiento que hay entre quienes padecen la injusticia; es en estos sujetos olvidados por la sociedad en los que el equipo tras este largometraje apuesta sus cartas y en los que parece haber una alternativa para hacer del país un lugar más justo y no ese barrial donde predominan el egoísmo y la apatía.

En los demás, en aquellos que escuchan lo que quieren oír, hay olvido, malicia y desinformación. Incluso entre la misma comunidad del protagonista, donde hay quienes no comprenden la injusticia cometida contra él, hay desprecio, porque ellos mismos lo han padecido alguna vez, haciendo más complejo el escenario que plantea la película y, por lo tanto, acercándola más a la realidad.

Cáceres y su equipo, en ese sentido, tienen claras sus intenciones y asumen causarán polémica, pero el manejo adecuado de su material fílmico, por escaso y reducido que resulte, está tan bien aprovechado que difícilmente se le podrá achacar uno que otro desperfecto que no ensucia el resultado final.

Esto porque Perro Bomba es un debut respetable y atrevido que dividirá a muchos y pondrá en evidencia aquello que critica, solo para hacer más fuerte el valor de su mensaje. Se trata de un filme que escarba en la xenofobia y el racismo capitalinos para mostrar sin tapujos una verdad incómoda y que ocurre frente a nuestras narices día a día. Probablemente será una obra que gustará poco (espero que no) y a la que no reconocerán inmediatamente sus virtudes (también espero que no), pero que sin duda las tiene y el tiempo así lo mostrará. No se la pierda.

 

Felipe Stark Bittencourt (1993) es licenciado en literatura por la Universidad de los Andes (Chile) y magíster en estudios de cine por el Instituto de Estética de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

Actualmente se dedica al fomento de la lectura en escolares y a la adaptación de guiones para teatro juvenil. Es, además, editor freelance. Sus áreas de interés son las aproximaciones interdisciplinarias entre la literatura y el cine, el guionismo y la ciencia ficción. También es redactor permanente del Diario Cine y Literatura.

 

Una escena de «Perro Bomba»

 

 

 

 

Tráiler:

 

 

Imagen destacada: Un fotograma del largometraje Perro Bomba (2019), del realizador Juan Cáceres.

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