La crónica «Escribir en Dictadura: No seamos como Jorge Edwards», debida a la autoría del ex presidente de la Sech, Edmundo Moure, generó una amplia reacción en el circuito literario local, entre ellas la del narrador Rafael Gumucio, quien calificó al texto de «infame».
Por Cine y Literatura
Publicado el 30.12.2019
«Qué infame el artículo de Edmundo Moure que me mandas», respondió el conocido escritor Rafael Gumucio Araya, luego de que a través de las redes sociales, este medio le hiciera llegar la crónica «Escribir en Dictadura»: No seamos como Jorge Edwards, un texto sin duda ácido y confrontacional, en donde el experimentado narrador chileno, abordó, en su habitual estilo culto y sin ambages, el comportamiento ético e intelectual del Premio Cervantes 1999, durante la década de 1980, en plena dictadura cívico-militar liderada por Augusto Pinochet Ugarte.
Consultado por este diario, a raíz del juicio de su compañero de oficio, relativo a su columna, el cronista de Memorias transeúntes, lejos de eludir una respuesta, virtualmente interpeló a Gumucio con sus aclaraciones:
«Yo participé en el Comité pro Libertad de Expresión, fundado en la Sociedad de Escritores de Chile (Sech) en 1983, del que Jorge Edwards fue presidente. Tiempos aciagos de la dictadura. Jorge estaba más preocupado de la censura a sus libros que de la censura nacional. Él es un digno y fiel representante de su clase, individualista a ultranza y neoliberal entusiasta de Piñera; y eso no le resta méritos literarios (atributo del que carece el periodista Rafael Gumucio, aunque confunda los puntos cardinales)», reflexiona Moure.
«Cuando Jorge Edwards recibió el Premio Cervantes -prosigue- fue duramente atacado por parte de la intelectualidad de izquierda de este país. Pero yo publiqué en Chile, en Argentina y en España, una crónica en su defensa -la que le hice llegar- reconociendo y destacando sus méritos de gran cronista», añade el ex presidente de la Sociedad de Escritores de Chile, en 1989.
«No obstante, su inquina contra la Revolución Cubana y contra el Socialismo lo hace mi adversario ideológico y mi enemigo neoliberal. No digo nada nuevo acerca de su adscripción al capitalismo salvaje, junto a su colega Vargas Llosa», complementa Moure.
«¿Qué pito toca aquí Rafael Gumucio?», se pregunta el también autor de la novela La voz de la casa (1985).
«Ninguno. Sobra, como es habitual para él en los eidos de la buena literatura», cierra con aspereza el redactor del Diario Cine y Literatura, en una crítica directa hacia la labor del creador de los cuatro cuentos de Invierno en la torre (1995).
En la citada crónica (publicada en este medio el viernes 27 de diciembre), Edmundo Moure afirmó que en los años de la dictadura cívico-militar chilena (1973 – 1990), Jorge Edwards, el autor de la novela El sueño de la historia (1999): «estuvo más preocupado de ridiculizar la figura de Salvador Allende y de denostar al régimen cubano, que de pararse frente a ese poder espurio que servía, sin límites, a su propia clase».
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Crédito de la imagen destacada: Ilustre Municipalidad de Santiago.